La paz como la expresión de un sistema en equilibrio dinamico.


Con este título hacemos referencia a una de las muchas formas que tenemos de entender el concepto de Paz.

Generalmente es una idea que asociamos a la ausencia de violencia en cualquiera de sus posibles manifestaciones, es decir: guerras entre pueblos o países, luchas entre pandillas callejeras, la violencia que genera la delincuencia, etc. Pocas veces nos acercamos a esta palabra con el pensamiento puesto en uno mismo. “estar en Paz”, lo utilizamos, casi mas, para hacer referencia a ?descanse en paz?, expresión que utilizamos para decir, se acabo todo.

Vamos a hacer referencia a otra forma de entender esta expresión, vamos a hablar de cómo la paz también puede hacer referencia al estado en el que una persona se encuentra cuando es totalmente EFICAZ.

Ocurre que cuando somos eficaces es porque estamos en un estado muy especial, un estado de “Equilibrio Dinámico”.

¿Qué queremos decir con esto?

Sencillamente, nuestro cuerpo, nuestro ser viviente es un sistema que está constantemente en movimiento, es decir no es un sistema que pueda estar quieto o en equilibrio estático; sino que es dinámico.

Lo importante es darnos cuenta de que cuando este equilibrio se produce es porque nuestros tres elementos básicos, se mueven al unísono, es decir con un nivel de vibración similar.

¿Cuáles son estos tres elementos?

?Las emociones, los sentimientos y los pensamientos?

Cuando están desajustados, se produce entre ellos lo que llamamos un “rozamiento”, todos sabemos que el rozamiento produce calor. Establezcamos una analogía entre una botella de gas y nuestro cuerpo (tengamos en cuenta que las emociones, los sentimientos y los pensamientos, no les podemos tocar, son como gases); cuanto más rozamiento hay, mas temperatura se genera. Al ser un recipiente cerrado, esto hace que aumente el calor y acaba explotando. Así le puede suceder a nuestro cuerpo, a nuestro ser. Llegado a este punto habrá tanto calor que explotará. Una manifestación de esto es la enfermedad, la depresión, las psicosis, las adicciones, etc.

Es aquí donde la autoestima se convierte en una herramienta que puede ayudarnos a equilibrar nuestro sistema en movimiento y conseguir que los tres vibren al unisonó creando ese estado que llamamos Paz, es decir:

La expresión de un sistema en equilibrio dinámico.


 

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